Spinoza: “Nadie hasta ahora ha determinado lo que puede un cuerpo”
Diego: “Así que es mejor no llegar a saberlo”
Primer problema: Que los asistentes lancemos a Diego pelotas de tenis durante 5 minutos. Un lanzamiento cada uno. Elegir qué trayectoria realizará la pelota desde nuestro cuerpo al suyo. ¿Cómo queremos golpearle?
En la palabra ballein, de raíz griega, habita una contradicción. Es una afirmación y una negación al mismo tiempo. Dos movimientos. El primero es la noción de lanzar, arrojar, disparar, proyectar, como movible afirmativo. Pero la etimología va más allá. Se lanza para golpear. En la noción para golpear aparece el problema porque nos obliga a pensar de nuevo la noción de la negatividad, es decir, pensar de nuevo cómo habérselas con el conflicto, el dolor, la noción del mal, qué puede un cuerpo porque un cuerpo puede ser herido y puede herir.
¿Qué relevancia tiene hoy pensar en el problema del sufrimiento en torno al cuerpo? ¿La afirmación en relación a la negación.
Elegí el futurismo y el manifiesto de Marinetti (1909) en cual dice que es más bello un automóvil a toda velocidad que la Victoria de Samotracia, pero más bello es aún es el sonido de las ametralladoras. Esto nos conecta con la primera palabra de ballein, la balística, el estudio de la trayectoria de los proyectiles. Todo el SXX ha tratado sobre cómo sobrevivir al dolor. He retornado a Adorno y Benjamín, sobre el tema del exilio y la Segunda Guerra Mundial, para pensar la catástrofe no como algo que está por venir, sino que lo catastrófico sea que las cosas sigan siendo como son.
Pero continuo con la idea de qué significa que un cuerpo pueda danzar/lanzar y herir. Si lo llevamos al límite ¿es que a caso ante todo es eso lo que un cuerpo puede? La primera definición de ser humano que aparece en la tragedia de griega de Sófocles dice que el hombre es el que hace temblar; el hombre es el que produce pavor. En consecuencia, no hace falta buscar un enemigo, somos nosotros. Lo que nos caracteriza como seres humanos es que nos lanzamos cosas los unos a los otros, es que nos herimos. El tiempo de hoy es también el tiempo de la barbarie. ¿De qué manera la poesía puede hablar después de la barbarie? Yo lo desplazo al baile y pregunto ¿cómo es posible bailar en las ruinas, en tierras pantanosas, en el campo de batalla una vez que ha terminado y solo quedan restos?
La noción de ballein, es por tanto, lanzar para golpear. Lleva implícito que la distancia es lo que se salva. ¿Por qué lanzar? lanzo porque algo está lejos y ese algo soy yo. También es una invitación a pensar la herida y la cicatriz en la distancia, cómo habérselas con esa distancia. Y también a pensar en la idea de poder. El título del festiva ¿qué puede un cuerpo? nos invita a pensar en el poder. Me gustaría pensar que si decimos que la catástrofe es que las cosas sigan siendo lo que son en lugar de algo por venir, la catástrofe es el inmovilismo, el rechazo al cambio, a la transformación. Es impedir el movimiento, que las cosas se muevas, es imponer control para que no haya demasiado movimiento porque el movimiento “es peligroso”. El error de esta afirmación es entender el poder desde inmovilismo, entender el poder desde una posición que se ocupa. Tengo poder porque ocupo un sitio. El poder no es una posición estática, es un movimiento de una posición a otra. Una vez que lo ocupas, el poder desaparece. Relacionar la idea de poder con devenir y con cierta facilidad de quedarse en la posición de poder, es entender el poder como quedarse en el poder. El poder debería ser un juego de posiciones constante. El inmovilismo es la aniquilación de la posibilidad de poder. El poder es movimiento.
Esa contradicción en el término de ballein nos invita a pesar en la noción de “a pesar de”. La idea de que por un lado tenemos el optimismo de la voluntad, mientras que vivimos en un pesimismo absoluto de la razón porque se ha dado cuenta de sus límites, y sin embargo, aún quiere poder. En el lanzar para golpear hay también una paradoja entre el querer desde cierto optimismo, que es lo que nos mueve. Pero vivimos en el pesimismo por exceso de discurso crítico que no nos da razones para pensar en el optimismo.
Coreografía, danza y baile, deben ser pensados en en su dimensión ética, o metafísicamente, desde el Ars vivendi, como uno se hace su vida, como uno construye su vida. ¿Cuál es la coreografía del sí? ¿De qué manera construyo mis trayectorias y me lanzo hacia un fin? Ars vivendi es hacer una existencia. Desde el plano ético, no se pude rehusar la invitación al baile porque desde el principio hemos sido arrojados ¿cómo abordar las consecuencias del lanzamiento? porque implica un golpe. Entonces, ¿cómo asumir las consecuencias éticas de la idea de lanzar y golpear? ¿Cómo asumir que nuestros lanzamientos pueden herir? ¿Cómo transformar un ataque en una invitación a bailar? ¿Cuál es el poder de que un ataque pueda ser una invitación a bailar? Pensar un ataque como algo afirmativo, como un mover las cosas de sitio y moverme de posición, porque hay que mover y lanzar, también hay que golpear. Estas ideas nos obligan a pensar en la violencia no como lo entienden los medias sino como una fuerza afirmativa.
Primer Souvenir
La filosofía, más que como una creación de conceptos es una invitación a ser pensada desde el bailar un problema o cómo coreografiar trayectorias de problemas. Si el juego se trata de problematizar-me, al lanzar estos problemas no nos queda otra que cogerlos como nos vienen. En la filosofía no es suficiente crear un problema, hay que bailar el problema también, hay que tomar un riesgo. Lo que se baila es el problema y lo que se baila es uno mismo problematizado. La filosofía es una coreografía de problemas, amad el problema que sois porque no nos queda otra. No se puede rechazar una invitación a bailar si ha sido el diablo el que te la ha lanzado.
La definición siguiente de bailar, que no es la de danzar, nos conecta con la idea de peligro. La la primera definición de danza en francés es una tiritona como reacción a una situación de miedo. Peligro es ante todo exponerse a una influencia poderosa. Y la danza es una reacción corporal ante algo peligroso, un temblor.
En griego, esta misma noción nos permite escapar a la noción de peligro porque en ella, la danza es peligrosa en sí misma. Bailar como un arrojo del cuerpo afirmativo, pero también peligroso. Como un querer poder moverse, querer por la voluntad. Un querer poder porque es peligroso y un querer moverse como principio activo de impulso y de mover las cosas. El poder no es ocupar una posición estática, sino un movimiento. Poder atravesar el poder como definición de cómo atravesar un dominio, cómo atravesar por el medio una relación de poder que desequilibre y descoloque esta relación.
Os pregunto: ¿cómo os las bailáis? ¿de qué manera te las estáis bailando? ¿te las bailas? o ¿cómo hacer que las cosas bailen?
Voluntad también viene de ballein. Lo encontré en Diálogos de Sócrates
Ahí dice que la voluntad es un lanzarse, un “tender a”. Y mientras tanto, un proceso de deliberación. Volver a la idea de poder como voluntad de poder, y traje el ejemplo ordinario de tender la ropa, porque decimos que la ropa tiende ¿acaso la ropa está queriendo algo? Yo me pregunto ¿de qué manera quiero en-tenderme? Quizás solo se trate de cómo uno se puede tender sin ser afectado por la gravedad.
Diego: quedan 15 minutos para terminar: aquí comienza el tiroteo. Más palabras.
Anfibología: ataque por ambos flancos. ¿Cómo bailar por sorpresa?
Anabolismo: lanzarse hacia arriba.
Catabolismo: lanzarse hacia abajo.
Metabolismo: cambio o transformación. Lanzamiento que lo cambia todo. Un cuerpo puede transformar un ataque en una invitación a bailar.
Parábola: lanzar al margen.
Palabra que siempre lanzamos como ataque. Herimos con palabras ¿cómo bailamos las palabras mientras las arrojamos?
Hipérbole: lanzar por encima demasiado alto, una exageración.
Símbolo: juntar lo que fue separado con violencia, reunir.
Émbolo: lo que se incierta. La coreografía como una manera de organizar una infiltración, un émbolo. ¿cómo infiltrarse?
Islas Baleares: famosas porque había gente esperando para tirar ondas.
Mi investigación dio con una palabra que me fascina: travesura, como una respuesta a la pregunta ¿qué puede un cuerpo?
Segundo Souvenir
Si es inevitable golpear en nuestro lanzamiento, pensemos en cómo queremos golpear. No hay nada más importante que pensar en la violencia como una afirmación.
¿Cuál es la definición de poder que la travesura propone? Poder es poder atravesar el poder. Es un movimiento que atraviesa, moverse es hacer que las cosas as muevan. Por lo tanto, ¿qué puede un cuerpo?…
Bailes peligrosos son los bailes que pueden…